PAKISTAN - Hna. Philomena Robert siente que su misión de enfermera entre pobres y enfermos es la respuesta a la llamada de Dios.
Estoy muy agradecida a Dios por mi llamada FMM. Dios me dio el regalo de ser miembro de esta familia internacional. Sé que Dios me ama y se preocupa de mí, pero aún así muchas veces me pregunto: «'Cómo puedo responder a la llamada de Dios como FMM en mi espiritualidad y mi misión?».
Como enfermera, cuando me preocupo por los enfermos y comparto su sufrimiento, me siento muy consciente del mundo que sufre alrededor. Todo esto me ayuda a mantenerme fiel a mi vocación, y hago la ofrenda de mí misma mientras consuelo y curo a los enfermos. Como María, yo también doy Jesús a los
demás. Siempre le pido a Dios la gracia de hacer mi ministerio con amor y paciencia. Que me ayude a ser fuente de valentía y esperanza frente a los pobres que encuentro en mi trabajo.
«Venid benditos de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo…porque estuve enfermo y me visitasteis».
Siento que este llamado misionero es muy especial. Dios me ha dado la gracia de curación. La uso para los parias, personas que otros se niegan a tocar. Siento alegría y satisfacción en mi vocación de enfermera. Esta MISIÓN a veces es rica y muy sensible.
Estos días en RahimYar Khan, respondo a sus necesidades visitándoles y preocupándome por las mujeres embarazadas en las ‘Haqas Bastis y Marwari’.
También estoy asesorando y facilitando el tratamiento a la infertilidad de las parejas. Cuido a los que sufren de Hepatitis A, B y C, así como a los que sufren por mordedura de serpientes y otras innumerables enfermedades.
Les muestro mi cariño y respeto mediante mi presencia y mis palabras de consuelo. Escucho con calma sus tristes e increíbles historias, los problemas familiares, tensiones etc. Como alguien dijo: “Los hechos son más elocuentes de las palabras”. Por ello, seguramente nuestras obras son importantes.
Como nuestro Padre S. Francisco me he hecho esta pregunta: «'Señor, qué quieres que haga? Jesús nos ofrece su amor y su curación y continúa su misión salvadora en el Santísimo Sacramento. 'Veo el dolor de Jesús en el sufrimiento de la gente?
Pido a Dos el espíritu de humildad y sencillez de San Francisco.
Philomena Robert, fmm
Publicado: 30/08/2013